Las lágrimas de Giménez: Uruguay se va del Mundial tras dejarlo todo

Quizás suene como un cliché decir que los uruguayos siempre juegan con el cuchillo entre los dientes, mordiendo cada palmo del terreno y que compiten hasta el pitazo final, no importando el marcador. Pero más que un cliché, es una tradición futbolística innegable. Un sentimiento. Este video te puede interesar. “La Garra Charrúa” es eso: […]
Quizás suene como un cliché decir que los uruguayos siempre juegan con el cuchillo entre los dientes, mordiendo cada palmo del terreno y que compiten hasta el pitazo final, no importando el marcador. Pero más que un cliché, es una tradición futbolística innegable. Un sentimiento.
“La Garra Charrúa” es eso: pelear, competir, disputar, presionar, caer, tratar de sobreponerse, sobreponerse, sentir el juego a diez mil revoluciones por segundo. Este viernes 6 de julio, el equipo dirigido por el maestro Óscar Washington Tabárez cayó, pero, eso sí, dio batalla hasta el último segundo.
Francia derrota con autoridad a Uruguay y va a semifinales
Uruguay salió afilado al primer tiempo. Los celestes mostraron orden defensivo y se exhibieron peligrosos a la contra con Luis Suárez y Cristian Stuani. Para este encuentro definitivo ante Francia, los charrúas no contaron con uno de sus mejores hombres: Edinson Cavani. Atrás, Fernando Muslera, Diego Godín y José María Giménez mantuvieron a raya al punzante tridente ofensivo de los franceses.
No se veía por dónde el cuadro dirigido por Didier Deschamps podía perforar la muralla azul. Solamente a través de la pelota parada los galos fueron capaces de traspasar el arco.
Cinco minutos antes de que acabara la primera mitad, Raphael Varane se elevó en el área y cabeceó de forma perfecta el cobro de un tiro libre. Esa fue la primera estocada para Uruguay.
Las lágrimas de José María Giménez
En el segundo tiempo, los uruguayos buscaron el gol con más intensidad. Estaban obligados. Esto también suena a cliché, pero la segunda anotación en contra cayó cuando mejor jugaban. Al minuto 61, Antoine Griezmann realizó un tiro de media distancia que, en teoría, no llevaba mucho olor de gol. Muslera no pudo rechazar el balón.
El esférico se le resbaló y entró a la portería. 2-0 y el partido parecía totalmente liquidado. Los charrúas, fiel a su estilo, no bajaron los brazos en ningún momento y disputaron con fuerza hasta el final.
En un dato anecdótico, las cámaras de televisión enfocaron a José María Giménez totalmente desconsolado. El defensa del Atlético de Madrid ofreció una imagen conmovedora y que no se ve de manera usual en la cancha. Todavía quedaban minutos por jugar, los celestes (incluyendo a Giménez) todavía estaban luchando cada pelota, pero las lágrimas comenzaban a aflorar.
Al final del encuentro, propios y extraños fueron a consolar al futbolista. La imagen nos dejó con un nudo en la garganta, pero también con una #Frescurasinamarguras. Da mucho gusto ver cómo los jugadores de Uruguay sienten la playera y se desviven por su selección en cada zancada, barrida, pase, recorrido, etc.
Después de ver al equipo charrúa en la Copa del Mundo, quedan las mejores sensaciones. Jugadores jóvenes como Matías Vecino, Rodrigo Betancur, Nahitan Nández, Lucas Torreira y Diego Laxalt hacen pensar que Uruguay regresará al mundial en cuatro años y seguirán siendo tan fuertes como ahora.