Astros del Mundial: Oliver Kahn

La Copa del Mundo de Corea-Japón 2002 estuvo cerca de quedar en manos de Alemania, pues Oliver Kahn hizo un torneo perfecto para llegar hasta la Final, donde se terminó su sueño.

El equipo germano inició con una goleada en contra de Arabia Saudita, pues los dirigidos por Rudi Völler se encargaron de humillar 8-0 a los asiáticos y sin que Kahn se despeinara en el encuentro.

Fue en el partido ante Irlanda cuando el arquero del Bayern Munich recibió su primer gol en la competencia, pues el atacante Robbie Keane fue el único que le pudo anotar en la Fase de Grupos y llego a estar 240 minutos sin permitir un tanto.

Conforme pasó el tiempo, el arquero alemán cada vez se agigantaba más y sus rivales no eran nada ante sus grandes atajadas y puso un cerrojo en la portería ante Paraguay, Estados Unidos y Corea del Sur. Esas actuaciones le sirvieron para entrar en la historia grande de la Copa del Mundo.

“Yo no era ningún fenómeno. No jugué en las selecciones juveniles de Alemania como otros. Yo aproveché mi potencial y fui creciendo paulatinamente. No llegué a la cima en un salto meteórico. Eso me hizo mucho bien en mi carrera”, cuenta Kahn.

Pero irónicamente, sería un “Fenómeno” el que acabaría con el poderoso gigante que se encontraba bajo los tres postes de la Selección de Alemania.

A la Final de Corea-Japón 2002 llegó por un lado Ronaldo y Brasil, mientras que por el otro Oliver Kahn y Alemania. Uno como el jugador con más goles en el certamen y el otro como el que menos goles recibió. El duelo en Yokohama era: Ronaldo contra Kahn.

Pese a toda la expectativa generada, el portero alemán no salió en su mejor momento y el duelo, que al inicio era equilibrado, terminó decantándose hacia el lado de los sudamericanos.

El Fenómeno puso nervioso a Kahn y un error del arquero permitió que el brasileño marcara el primer gol con el que se encaminaron al título de la Copa del Mundo.

“No encuentro consuelo, tendría que haber atrapado ese balón… pero se me fue. Mi único error en esta Copa del Mundo ha tenido un castigo brutal“, comentó.

A pesar de haber perdido la Final, en el duelo por el Balón de Oro del Mundial 2002 el alemán ganó la batalla. La elección del mejor jugador del torneo se hizo pública dos días después y sumó 147 votos, el 25 por ciento de los emitidos por los medios de comunicación y se quedó con el máximo reconocimiento. Su verdugo, Ronaldo, se quedó en la segunda posición con 126 votos.

De los siete partidos que jugó con Alemania, Kahn solo recibió 3 goles, quedando cerca de romper el récord de menos goles recibidos en una Copa del Mundo, hasta que el Fenómeno se apareció y terminó con el sueño de los alemanes.

Cuatro años más tarde, Oliver Kahn se despidió de la Selección Alemana en la Copa del Mundo de 2006 en su país. Fue el partido por el tercer lugar donde la Mannschaft  derrotó 3-1 a Portugal y se quedó con el tercer lugar del certamen.