El suicidio, un tema tabú en el futbol

Contrario a lo que podría pensarse, la del futbolista no siempre es la profesión soñada que a muchos aficionados les encantaría tener. Los salarios millonarios, la publicidad, la fama y los lujos que gozan algunos, provocan que en ocasiones los fanáticos, los medios de comunicación y la sociedad en general, se olvide que los jugadores también son personas que, en ocasiones y como muchos otros, encuentran en el suicidio la única solución a sus problemas.

La popularidad, la abundancia y la aparente perfección que viven algunos futbolistas, esconden exigencias, presiones y frustraciones que llevan a jugadores a la depresión, a las drogas, a los excesos y, en el peor de lo casos, a muertes trágicas. Pasar de la gloria a la desgracia, lidiar con la presión mediática que implica dedicarse al futbol, o sobrellevar la presión social por ser diferente, además de los problemas comunes con la familia, la pareja, los amigos, etc., es un cumulo de decepciones insoportable para algunos jugadores.

Compañeros le dan el último adiós a Robert Enke, portero del Hannover

El suicidio no es un tema exclusivo del futbol. La decisión de quitarse la vida está presente en cualquier ámbito de la sociedad y las cifras de suicidios alrededor del mundo siguen siendo alarmantes. No obstante, por la naturaleza del deporte, el tema todavía no tiene mucha visibilidad en el mundo futbolístico.

Suicidio, un tema tabú

Aunque de 2010 a 2016 la tasa global de suicidios se redujo 9.8 por ciento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene registro de que 800 mil personas se suicidan al año. Lo anterior significa que aproximadamente una persona se quita la vida cada 40 segundos. Además, el organismo de la ONU estimó que por cada muerte hay 20 intentos más y solamente 38 países en todo el mundo tienen estrategias para prevenir esta situación.

Jugadores del Hannover hicieron un altar al arquero Robert Enke, que se suicidó en 2009

En el futbol, es más complicado contabilizar las víctimas. De acuerdo con el diario Marca, en 2017 se calculó que una media de 60 suicidios al año entre futbolistas. No obstante, el 90 por ciento de los casos no se les denomina como tal, sino que se habla de un accidente y eso dificultad tener claridad en las cifras. Sin embargo, el mismo medio refirió que “el porcentaje de suicidio en la élite deportiva es muy parecido al de la población normal”.

“El deporte de alto rendimiento es un lugar en el que se movilizan emociones de manera muy intensa. No es que sea un lugar propenso al suicidio, no hay estudios que demuestren una relación directa entre deporte de alto rendimiento y el suicidio. Pero sí es cierto que aquellas personas que dedican su carrera profesional muy corta, en la que aprenden que su valor como persona depende de su rendimiento, en el momento que se termina muchas personas pueden sufrir un trastorno depresivo” explicó Patricia Ramírez, psicóloga deportiva, en entrevista con el medio español.

La tragedia de Enke

Aunque son varios los casos de futbolistas que toman la decisión de quitarse la vida, algunos de ellos son más recordados por las circunstancias y la manera en la que ocurrieron. Probablemente, la historia que sigue más presente en la memoria de los aficionados es la de Robert Enke, quien en noviembre cumplirá 10 años de fallecido. El portero alemán, que entre otros equipos jugó en el Barcelona, se arrojó a las vías del tren en 2009, tres años después del fallecimiento de su hija de dos años.

Enke había estado en tratamiento por primera vez en 2003, tras jugar con el Barcelona y el Fenerbahçe. Esa experiencia provocó en el arquero un miedo patológico al fracaso, sobre todo luego que en el club turco los aficionados lo abuchearon y le lanzaron objetos, razón por la que abandonó al equipo. Con miedo a que su carrera se viera perjudicada, nunca quiso entrar en tratamiento. Sin embargo, el fallecimiento de su hija en 2006 y el miedo de quedar fuera de su selección siete meses antes del Mundial de 2010, fueron situaciones que no pudo soportar.

Enke era arquero del Hannover al momentod e su muerte

El guardameta tenía 32 años cuando decidió suicidarse y jugaba con el Hannover. Tras la noticia de su muerte, cientos de fans dejaron flores y velas en la entrada el AWD-Arena, casa de los ‘Rojos’. Además, el club junto con la Liga Alemana de Futbol, participaron en la creación de la Fundación Robert Enke, en la cual se ocupan de atender la salud mental de jugadores. También atienden niños con afecciones cardiacas, que fue la causa de muerte de la hija del arquero.

La presión mediática y social

Otro de los casos más recordados es el de Justin Fashanu, jugador inglés y de origen nigeriano y primer futbolista en declararse abiertamente homosexual. Fashanu debutó como profesional con el Norwich City en 1978 y en 1981 lo traspasaron al Nottinghan Forest, en ese entonces dirigido por el polémico entrenador Brian Clough. En esa época, su traspaso por un millón de libras fue todo un récord, pues además se convirtió en el primer jugador de raza negra por el cual se pagó una cifra tan alta.

Sin embargo, su preferencia sexual provocó que su carrera se estancara. Clough, molesto con los rumores de que Fashanu frecuentaba discotecas y bares gays, nunca le dio la confianza y el jugador terminó saliendo del equipo. El jugador pasó por varios equipos de Inglaterra y un par en Estados Unidos y Canadá. En 1990 declaró abiertamente su homosexualidad, pero siguió su consolidar su carrera, probando suerte también en Escocia y Suecia.

Fashanu fue el primer futbolista abiertamente homosexual

En 1998, en Estados Unidos lo acusaron de abuso sexual pero no lo detuvieron y el jugador decidió regresar a Inglaterra. Una vez en Londres, Fashanu, de 37 años de edad, se suicidó al ahorcarse en un garage abandonado en Shoredithc. “Me he dado cuenta de que ya he sido condenado como culpable. No quiero ser más una vergüenza para mis amigos y familia […] espero que el Jesús que amo me dé la bienvenida y finalmente encuentre la paz” escribió en la nota que dejó.

Otros casos

El de Abdón Porte es probablemente uno de los suicidios más antiguos en el futbol. Mediocampista uruguayo, fue capitán e ídolo del Nacional, llegó al club a los 18 años y no tardó en consolidarse como titular. No obstante, siete años después, cuando perdió la titularidad en el equipo, algo insoportable para el jugador. La mañana del 5 de marzo de 1918 lo encontraron en el centro de la cancha del Nacional, con un disparo en el pecho, una pistola en una mano y en la otra una carta dirigida a los directivos del club.

Abdon Porte tenía 25 años al momento de su muerte

“Nacional, aunque en polvo convertido y en polvo siempre amante. No olvidaré un instante lo mucho que te he querido. Adiós para siempre” escribió en la nota el jugador. Su muerte, a los 25 años de edad inspiró el cuento Juan Polti, half-back de Horacio Quiroga, y Eduardo Galeano también lo mencionó en un capítulo de su libro Futbol a Sol y Sombra, bajo el título “Muerte en la cancha”.

Algunos suicidios recordados

• Gary Speed: Ex-futbolista y entrenador de la Selección Galesa en 2010, su esposa encontró su cuerpo inerte colgando en su casa en noviembre de 2011. Tenía 42 años.
• Lester Morgan: portero costarricense, se disparó en la cabeza en 2002 en una cabaña que había alquilado. Tenía 26 años.
• Sergio Schulmeister: portero argentino, lo encontraron colgado con un cinturón en la cocina de su casa. Tenía 25 años.
• Alberto Vivalda: ex-portero argentino, en febrero de 1994 se aventó a las vías del ferrocarril Mitre, en la estación Vicente López.Tenía 34 años.
• Héctor Damián Larroque: ex-portero argentino, se ahorcó en la terraza de su casa en agosto de 2011. Tenía 39 años.
• Agostino Di Bartolomei: ex-defensa italiano, se disparó en 1994, 10 días después de la derrota de la Roma en la final de la Copa Europea. Tenía 39 años.
• Dave Clement: defensa inglés, sufría depresión y en 1982 se envenenó con herbicida. Tenía 34 años.
• Mirko Saric: volante argentino, tras romperse los ligamentos de la rodilla izquierda lo encontraron ahorcado con un sábana en su casa en 2000. Tenía 21 años.
• Joan Gamper: fundador del FC Barcelona, por haber apoyado al nacionalismo catalán le prohibieron relacionarse con las actividades del club. Se disparó en julio de 1930. Tenía 52 años.