La violencia mancha al futbol otra vez

Otro incidente vergonzoso ocurrió este sábado en el futbol, cuando el camión en el que viajaba el Atlético Nacional fue recibido con piedras que lanzaron aficionados del equipo local.

En la Jornada 11 de la Liga Águila, la Primera División de Colombia, el equipo verdiblanco visitó al Cúcuta y los jugadores pasaron un mal momento, al momento de llegar al estadio.

Aficionados del conjunto local lanzaron piedras contra el vehículo en el que viajaba el Atlético y rompieron los vidrios del mismo. Afortunadamente, nadie salió herido después de este incidente.

Varios jugadores del equipo verde denunciaron en redes sociales lo ocurrido y lamentaron que una vez más la violencia manche el espectáculo. Hernán Barcos, Aldo Leao Ramírez, Pablo Ceppelini y Andrés Perea subieron imágenes de lo ocurrido y rechazaron que esto siga ocurriendo.

En las imágenes que compartieron los jugadores se alcanzan a ver los vidrios rotos de las ventanas del autobús después del ataque. De igual manera, el club mandó un comunicado en el que invita a todas las autoridades a combatir estas situaciones. Al final, el Atlético se impuso 3-1 en el juego.

“El bus en el que se transportaba nuestro equipo profesional hacia el estadio General Santander fue atacado a piedras, una de ellas impactó y entró por una de las ventanas. Afortunadamente no causó heridas físicas a ninguna de las personas que viajaban, jugadores, cuerpo técnico y directivos. Este hecho es una alerta para seguir trabajando en combatir y erradicar los actos de violencia fuera y dentro de los estadios”.

#Comunicado | Sobre actos de violencia previos al partido en Cúcuta: 👉🏼 https://t.co/LBSbO6lAF6 👈🏼 #SomosLaPasión pic.twitter.com/OilflNDIKE

— Atlético Nacional (@nacionaloficial) 23 de marzo de 2019

No es la primera vez que un hecho de esta índole se presenta en Sudamérica. Cabe recordar que el año pasado la final de la Copa Libertadores tuvo que trasladarse a Madrid por los incidentes violentes registrados en Argentina con los aficionados de River Plate, quienes apedrearon el camión de Boca Juniors.