André-Pierre Gignac aspira a dirigir a Tigres en un futuro

André-Pierre Gignac es sin duda uno de los extranjeros más determinantes que han llegado a México en años recientes. El delantero ha sido pieza angular en el éxito de Tigres en la última década y le ha ganado tanto cariño al club que aspira a dirigirlo algún día.

En entrevista con RMC, el delantero francés habló sobre su futuro y su deseo de permanecer con el equipo de la UANL tras su retiro. No obstante, reconoció que deberá seguir el proceso correspondiente.

“El plan es quedarme en Tigres después de retirarme e ir subiendo escalones en el club; ir paso a paso”, declaró y reconoció que sí es una opción llegar a ser director técnico del equipo.

Gignac acaba de renovar contrato por tres años más con Tigres. El francés llegó al club en 2015, por lo que si se queda los tres años que le quedan, dejará a los felinos después de casi 10 años.

En ese sentido, el delantero enfatizó que se siente muy contento en México, donde ha podido encontrar una calidad de vida que no disfrutaba mientras estuvo en Francia.

“Pedí la ciudadanía mexicana, pero todavía no tengo los papeles, los estoy esperando. Quiero ser igual que mis hijos, tienen la doble nacionalidad, son franco-mexicanos. Podría quedarme vivir en México, aquí es una calidad de vida que no puedo tener en Francia”. 

Trauma de la Eurocopa sigue presente

Por otra parte, Gignac habló sobre su participación en la Eurocopa 2016 con la Selección de Francia. En la final del torneo, el delantero de Tigres tuvo la oportunidad de empatar el juego ante Portugal sobre el último minuto, pero su disparo se estrelló en el poste.

“No dormí por meses. No estaba en depresión ni nada, no en este momento. Pero los días posteriores a la final, cuando volví a casa en Cassis, soñé que me había marcado el objetivo. y que lo estaba celebrando con mis amigos”. 

Gignac añadió que la decepción de la Eurocopa se sumó a la pérdida de su abuela, por lo que en su regreso a México tuvo un momento de poca efectividad con los Tigres.

“En el primer partido, marco. En el segundo partido, me lanzo loco. Y después … ¡un apagón! Ni siquiera explico. Detrás, perdí a mi abuela que era muy importante para mí. El año 2016 podría haber sido fantástico y, aparte de dos detalles, aquí está”.