Hasta ahora, Cruz Azul Femenil jugaba de local en La Noria
Cruz Azul Femenil atraviesa un periodo de cambios profundos tras su histórico Apertura 2025, en el que alcanzó las primeras semifinales de su historia y consolidó un proyecto competitivo. Con la reestructuración en marcha para el Clausura 2026, el club no solo evalúa bajas y refuerzos, sino también un eventual cambio de sede, ya que según fuentes consultadas por Estadio Deportes, la directiva analiza la posibilidad de que el equipo deje la Ciudad de México.
Según la fuente señalada, la opción de abandonar La Noria surge por la inconformidad de las jugadoras con el limitado aforo del lugar, donde la asistencia suele recaer en familiares y personal interno del club. Tras disputar toda la Liguilla en el Estadio Olímpico Universitario, las futbolistas experimentaron un ambiente distinto, con una afición más numerosa y un apoyo que marcó un contraste significativo respecto a su sede habitual. Varias miembros del plantel expresaron su deseo de jugar en un estadio que permita una conexión real con la afición cementera.
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Durante las últimas semanas, la directiva ha recibido estas peticiones y comenzó a estudiar alternativas que otorguen mayor proyección al equipo. La intención es que Cruz Azul Femenil tenga un entorno digno de su crecimiento competitivo, especialmente después de un torneo que elevó las expectativas del proyecto.
El periodista Bruno Hernández asegura que Morelos se posiciona como la opción más fuerte para recibir al equipo. La logística favorece un traslado a esa entidad, debido a su cercanía con la Ciudad de México y la disponibilidad de estadios como el Centenario o el Mariano Matamoros, que ofrecen mayor capacidad y condiciones más adecuadas para el desarrollo del futbol profesional. Además, el interés de autoridades locales facilita el análisis de un cambio que mejoraría la experiencia de jugadoras y aficionados.
La reciente clasificación a semifinales potenció la búsqueda de sedes que respondan al nivel competitivo del equipo. Aunque la directiva no ha tomado una decisión definitiva, el estudio avanza con la intención de concretar una resolución antes de que termine el año.
El cambio de sede también forma parte de un replanteamiento general dentro del club, tras años en los que Cruz Azul Femenil operó con recursos limitados. La necesidad de estabilizar un proyecto que ahora exige condiciones más profesionales ha llevado a la dirigencia a considerar un movimiento que fortalezca la imagen del equipo. La restructuración incluye la salida de jugadoras como Solange Lemos, Deneisha Blackwood y Clarissa Kirsch-Downs, mientras el equipo incorpora refuerzos para sostener el impulso alcanzado en 2025.
En ese escenario, un estadio con mayor infraestructura representaría un paso natural en la evolución del equipo. La directiva entiende la importancia de ofrecer un entorno competitivo acorde al nivel alcanzado y estudia todas las variables antes de oficializar una decisión.
El movimiento de Cruz Azul Femenil busca brindar estabilidad y proyectar al equipo hacia objetivos más ambiciosos en la Liga MX Femenil. La mudanza a Morelos aparece como la opción más sólida para cumplir con las necesidades logísticas, deportivas y de aforo que el club no encuentra actualmente en La Noria. La definición se formalizaría en las próximas semanas, mientras las jugadoras se preparan para un Clausura 2026 que marcará un punto decisivo en su crecimiento.
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