Aunque no parecen estar conectados, AEK Atenas se ha convertido en la maldición de fichajes fallidos en Pumas que inició con Ignacio Scocco
Aunque no parecen estar conectados de ninguna forma, el club griego del AEK Atenas se ha convertido en la maldición de fichajes fallidos en Pumas que inició con Ignacio Scocco. Sin duda alguna, los Felinos no han tenido buena suerte.
La frustración de los aficionados de Pumas en este mercado de fichajes no es una historia nueva. A lo largo de los años, el equipo ha visto cómo sus objetivos se escapan de las manos.
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Pero hay un patrón tan inusual como real: una especie de ‘maldición’ que parece estar ligada al equipo griego AEK de Atenas.
El origen de este ‘fantasma’ se remonta a 2008. Ignacio Scocco, un joven delantero que militaba en los Pumas, era una de las promesas más codiciadas. Pese a que el club universitario buscó retenerlo, el jugador terminó dejando al futbol mexicano. ¿Su destino? El AEK de Atenas. El club griego pagó cerca de 1.5 millones de euros y se llevó a la figura que la afición de Pumas quería conservar.
La historia se repitió en el verano de 2024. Pumas, en su búsqueda por reforzar el ataque, fijó su atención en el extremo sueco Niclas Eliasson, quien en ese momento jugaba, curiosamente, para el AEK de Atenas.
Los rumores de su llegada a la Liga MX eran fuertes, pero al final, la operación no se concretó y Eliasson se mantuvo en Europa, dejando a Pumas con las manos vacías una vez más.
El último capítulo de esta maldición ocurrió en el verano de este 2025. Pumas buscó con insistencia al delantero francés Anthony Martial para darle un golpe de autoridad al mercado. La afición se ilusionó con la posible llegada de una figura de élite, pero la historia tuvo un final doloroso. Martial, quien militó en el AEK de Atenas, terminó firmando con los Rayados de Monterrey, dejando a Pumas sin su gran fichaje y consolidando el patrón de los jugadores que se escapan.
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