Mejores Super Bowl de la historia: XLIX Seahawks vs Patriots

La edición del Super Bowl XLIX se vivió entre los New England Patriots y los Seattle Seahawks, en la cual destacó la última jugada en la que Malcolm Butler interceptó el pase de Russell Wilson y terminó con la esperanza de los Halcones Marinos de darle la vuelta al adverso marcador 28-24.

Esa última jugada recibió duras críticas, pues los expertos no entendieron por qué Wilson no jugó con Marshawn Lynch, el corredor estrella en la temporada, y decidió lanzar en segunda y gol, a una yarda de las diagonales, con 26 segundos en el reloj y un tiempo fuera. En el aspecto defensivo, la intercepción de Butler es considerada una de las mejores en la historia.

Después de terminar sin puntos en el primer cuarto, los Patriots se fueron arriba en el marcador 14-7  en el segundo episodio. En la última serie ofensiva antes del descanso, el entrenador Pete Carroll optó por apostar por el touchdown y no por el gol de campo con seis segundos en el reloj.

Butler le dio el triunfo a su equipo al interceptar el pase de Russell Wilson

Wilson completó un pase de 11 yardas con Chris Matthews y Seattle empató el encuentro a 14 previo al medio tiempo. Para el tercer cuarto, los Seahawks tomaron la ventaja de diez puntos y la defensiva dejó en ceros a los Patriotas. Hasta ese momento, ningún equipo había logrado reponerse de una desventaja de más de siete puntos al inicio del último cuarto.

Pero New England cambió la historia y con un par de pases para touchdown de Tom Brady, el primero de cuatro yardas para Danny Amendola y el segundo de tres yardas para Julian Edelman, lograron darle la vuelta al marcador 28-24 y le dejaron apenas dos minutos en el reloj a los Seahawks.

Los Halcones Marinos hicieron una gran serie ofensiva, incluida una espectacular atrapada de Jermaine Kearse, y hubo quienes la compararon con la jugada de David Tyree en el Super Bowl XLII. No obstante, fue la ya mencionada última jugada la que terminó con sus aspiraciones de ganar su segundo Super Bowl consecutivo.

Con 37 pases completos de 50 intentos, 328 yardas por aire, cuatro pases de anotación y dos interceptados, Brady fue elegido el MVP del juego. Por otra parte, los de Pete Carroll se convirtieron en el cuarto equipo que llegó al Super Bowl como campeón vigente que no logró defender su corona.