El verdugo del partido: Mario Mandzukic

El delantero de Croacia, Mario Mandzukic, fue uno de los grandes protagonistas de la derrota después de haber anotado el autogol con el que se abrieron las hostilidades de la Final del Mundial, y que a la postre derivó en la derrota de su selección.

Era el minuto 18, y en una jugada a balón parado, y el ariete croata atacó mal el esférico en el aire, y simplemente prolongó el balón con una “peinada” que fue directo hacia la red sin que el arquero Subasic pudiera hacer algo por evitarlo.

Cuando el partido se encontraba 4-1, Mandzukic pudo lavar su error aprovechando un grosero error del arquero Hugo Lloris para anotar el 4-2, pero ya era muy tarde para intentar levantar a una Croacia que ya estaba abatida tras la desventaja de tres goles.

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Mandzukic no pudo ser el delantero de otros partidos, donde había sido más determinante y que incluso había llevado a Croacia hasta el partido por el título.

Al final, Croacia perdió 2-4 ante Francia y con ello se le escapó la oportunidad de lograr la primera Copa del Mundo de toda su historia, y ser la primera generación ganadora.