Jorge Campos confiesa que Cruz Azul lo rechazó

El que por muchos es considerado el mejor guardameta mexicano de todos los tiempos, Jorge Campos, ha relatado que su sueño de ser futbolista profesional tuvo su comienzo en la Noria con la Máquina de Cruz Azul cuando apenas tenía 16 años y donde jugaba en la tercera división de los cementeros; sin embargo, duró poco tiempo, ya que su destino no estaba ahí sino en los Pumas de la UNAM, pues en su momento desde la escuadra celeste lo terminaron rechazando.

El llamado ‘Brody’, sin revelar la identidad de quienes dejaron pasar su talento ante sus ojos, confesó que en Cruz Azul no quisieron asumir su formación por la corta edad que tenía, de forma que le pidieron volviera ya que tuviera 18 años, pero en ese camino de dos años se interpuso Pumas y ya nunca volvió a la Noria.

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“Era el seminario, estuve como un mes (en La Noria), no recuerdo mucho. No puedo dar nombres, pero no me corrieron, simplemente me dijeron que estaba muy chico, en esa época los de la reserva tenían 18, 20 años, yo estaba entrenando con algunos del primer equipo y reserva”.

“Estuve entrenando y me dijeron regresa en dos años ya que estés más fuerte, en un año creo, regresa el próximo año, pero mi papá ya me había dado mil regañadas para que terminara la prepa y ya me fui, pero en lugar de regresar a Cruz Azul me fui a Pumas, porque Miguel me invitó. Vino Mejía Barón, habló con mi papá y le explicó cómo era el trámite y mi papá aceptó”, relató el hoy comentarista de Azteca Deportes en entrevista con Javier Alarcón.

Fue en un partido entre Cruz Azul y Pumas en la tercera división, cuando un Miguel Mejía Barón quedó maravillado con el talento de Jorge Campos y tuvo la certeza que podían terminar de pulir su talento en la cantera universitaria, por lo que una vez descubierto ya no dejo que fuera a otro lado.

“En el inter viene Pumas a jugar contra la tercera división. Ahí me ve Miguel Mejía Barón, jugué el primer tiempo, me metieron dos goles; baja Miguel, habla conmigo y me dice que me vio muy tranquilo para tener 16 años. […] El Chino le dice que iba a regresar a Cruz Azul y Barón dijo: ‘No, no, no, que se venga a Pumas’“, platicó el conocido como ‘Inmortalidad’.

El mismo Mejía Barón viajó hasta Acapulco para convencer a su papá que lo dejara jugar, lo logró y se encargó de formarlo hasta llevarlo a la primera división, el resto de la historia de Jorge Campos lo ha llevado a ser una leyenda del balompié azteca.

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