Los humildes orígenes de Kanté, el cerebro detrás del juego de Francia

N’Golo Kanté se ha convertido, sin duda alguna, en una de las máximas figuras de la Copa Mundial Rusia 2018. El mediocampista de la selección francesa ha deslumbrado con su juego y ha sido capaz de darle equilibrio a su escuadra. Por esto, no es ninguna sorpresa que clubes como Real Madrid, Barcelona y Paris […]
N’Golo Kanté se ha convertido, sin duda alguna, en una de las máximas figuras de la Copa Mundial Rusia 2018. El mediocampista de la selección francesa ha deslumbrado con su juego y ha sido capaz de darle equilibrio a su escuadra. Por esto, no es ninguna sorpresa que clubes como Real Madrid, Barcelona y Paris Saint-Germain estén detrás de sus pasos. Tampoco sorprende que Chelsea, dueño de su carta, busque retenerlo a como dé lugar. Cueste lo que cueste.
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“Kanté es el mejor medio defensivo del mundo”: Hazard
Cuando está en su mejor forma, tienes un 95% de posibilidades de ganar el juego“, dijo Hazard a la cadena BeIN Sports.
La increíble y humilde historia de N’Golo Kanté
El medio galo vive actualmente una #FrescuraSinAmarguras, ya que jugará su primera final de Copa del Mundo. No obstante, hay una parte de la historia de N’Golo Kanté que no conocemos a profundidad.
Cuando N’Golo tenía siete años, señalan varios medios de comunicación, recorría los suburbios de París buscando basura para reciclarla y, así, apoyar a su familia, misma que atravesaba por una difícil situación económica.
Al cumplir los once, Kanté recibió una noticia terrible: su padre murió. El niño tuvo que incrementar los kilómetros que recorría a diario para tratar de llevar más dinero a su casa.
En el panorama profesional, las cosas tampoco fueron fáciles para el mejor mediocentro del mundo. Kanté fue rechazado por varios equipos debido a su baja estatura. El futbolista mide actualmente 1.68 metros.
Según versiones periodísticas, el cerebro que le da equilibrio a la escuadra dirigida por Didier Deschamps, vio la final de la Copa Mundial Francia 1998 mientras buscaba basura que reciclar en las calles parisinas.
Este domingo, en una de esas vueltas que da el destino, Kanté podría levantar el título con “les bleus”.